Es una lluvia de estrellas, sin más, pero que tiene lugar en estas fechas (en Noviembre) y serán visibles durante un par de días más. El radiante (punto del cielo del que parece que provienen) está en una zona denominada constelación del León, y por eso se llaman Leónidas.
Mientras la Tierra va realizando el movimiento alrededor del Sol (translación), nuestro planeta choca con unas partículas que van vagando por el espacio. Estas partículas son pequeños granitos de arena, hielo y polvo que van dejando los cometas y que permanecen allí durante siglos y siglos.
El efecto es similar a ir con el coche a toda velocidad y chocar con un insecto que vuela tranquilamente por el aire. La marca que queda en el parabrisas, se asemejaría al efecto de una estrella fugaz en el cielo. Es decir, estas partículas se incendian cuando rozan con nuestra atmósfera (cual cerilla con la lija) y brillan por todo el cielo. Dependiendo del tamaño y de la dispersación serán mas brillantes y más numerosas. Este año se estiman 15 meteoros por hora.
Desde España, mientras no esté nublado, la mejor hora para poder observarlas será poco antes del amanecer, con la luna apenas visible.
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